16 octubre 2008

EL HOMBRE Y LA MUJER




El hombre es la más elevada de las criaturas.

La mujer es el más sublime de los ideales.



Dios hizo para el hombre un trono;

para la mujer un altar.

El trono exalta; el altar santifica.



El hombre es el cerebro.

La mujer el corazón.

El cerebro fabrica la Luz;

el corazón produce el Amor.



La Luz fecunda; el Amor resucita.



El hombre es fuerte por la razón.

La mujer es invencible por las lágrimas.

La razón convence;

las lágrimas conmueven.



El hombre es capaz de todos los heroísmos.

La mujer de todos los martirios.

El heroísmo ennoblece;

el martirio sublimiza.



El hombre tiene la supremacía.

La mujer la preferencia.

La supremacía significa la fuerza;

la preferencia representa el derecho.



El hombre es un genio.

La mujer un ángel.

El genio es inmensurable;

el ángel indefinible.



La aspiración del hombre es la suprema gloria.

La aspiración de la mujer es la virtud extrema.

La gloria hace todo lo grande;

la virtud hace todo lo divino.



El hombre es un código.

La mujer un evangelio.

El código corrige;

el evangelio perfecciona.



El hombre piensa.

La mujer sueña.

Pensar es tener en el cráneo una larva;

soñar es tener en la frente una aureola.



El hombre es un océano.

La mujer es un lago.

El océano tiene la perla que adorna;

el lago la poesía que deslumbra.



El hombre es el águila que vuela.

La mujer es el ruiseñor que canta.

Volar es dominar el espacio.

Cantar es conquistar el alma.



El hombre es un Templo.

La mujer es el Sagrario.

Ante el templo nos descubrimos;

ante el Sagrario nos arrodillamos.



En fin:

el hombre está colocado donde termina la tierra.

La mujer donde comienza el cielo.



Víctor Hugo

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Habia leido muchas veces este texto, pero esta vez fue diferente; lo encontré bastante machista... no creo que estés de acuerdo conmigo, sino supongo que no lo habrías puesto...

"Pa gustos colores^^"

Ana dijo...

Qué curioso, a mí casi me parecía al contrario. No llega a ser feminista, pero casi!!!
jajaja. De verdad que los puntos de vista pueden ser bien diferentes.
Gracias por tu comentario.
Besos linda

Anónimo dijo...

Vaya, ni siquiera la poesía -pura-, escapa al filtro dogmatizado y demagogo de las ideologías arbitrarias, al "alienamiento" psíquico que padece una parte de la sociedad.

No sé que han visto de "machista" de no ser el propio insulto de considerar tal pensamiento machista.
Mucho complejo, tópico y -porqué no decirlo- idiotez es lo que impera.
Y opino pidiendo excusas por parecer rudo pero es que hay cosas que rayan la paranoia y no merecen mayor consideración ni detalle.

Sin embargo y a pesar del intento de "castración" hacia el sexo masculino (es algo aberrante y una desviación típica de mentes enfermas, tanto en hombres como cada día más, en mujeres), he disfrutado enormemente de este artículo.

Ana dijo...

Gracias por tu comentario, lector anónimo. No trataba de ser machista ni feminista, ay!! El poema me gustó. Ensalza al hombre y a la mujer. Los dos son diferentes, y cada uno tiene su lugar importante. Los hombres necesitan de las mujeres, y las mujeres de los hombres. Por eso Dios, que sabe lo que se hace, hizo una pareja, que se complemente, que sean el uno para el otro ayuda idónea.
Creo que es lo mejor del mundo, el poder complementarse, el unir las características del hombre y de la mujer físicas, psíquicas, mentales, morales... es el complemento ideal!